Tarareando las canciones
del mar donde conocí la risa,
cualquier tejado es refugio,
cualquier refugio, morada,
cualquier morada mi sitio
si el viento aviva las aguas.
Que allá donde el horizonte llegue
un día se extiendas mis alas,
para poder enseñarte
que tan solo un río nos separa.
Por las historias que rondan tu mente. Por las ganas de cambiar el mundo. Por las rimas. Por la música. Por el arte... El primer puercoespín enamorado de las letras comparte sus cuadernos de poesía. Cuidado, puede ser muy dulce o utilizar sus púas.
sábado, 4 de julio de 2020
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Lo más leído
-
Te he visto en el llanto de otros ojos y me he atado al naufragio, sin cuerda de seguridad, sin escape. He sentido tu abandono, como la pri...
-
Una vez más, Sandra y yo nos lanzamos con esta técnica para hacer cosquillas a las musas y que nos traigan nuevas ideas. Para el/la que no...
-
Hoy he soñado contigo y, hasta en sueños, te has reído de mí; me has mirado a los ojos y no has dicho absolutamente nada. Te has...
-
No encuentro palabras suficientes, ni sinónimos necesarios... Tu cuerpo no tiene nombre, ni tus besos, adversario.

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Ahora me toca leerte a mí, soy todo... ojos, supongo: