en la que habría dado todo
por morir contigo.
Pero decidiste irte sola.
Hubo un tiempo
en que habría llorado
cada una de tus lágrimas.
Pero no quisiste compartir el mar.
Hace no tanto,
tan solo una vida,
éramos tú y yo,
éramos las dos juntas...
Y tú,
no tenías secretos que contarnos.
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Ahora me toca leerte a mí, soy todo... ojos, supongo: