BAILE
DE SILLAS
Cap.
6-
Al final sí fui al
ensayo, aunque no debería haberlo hecho; ¿queréis saber por qué? Ahora os lo
cuento:
Según entré por la
puerta sentí la mirada de todos fija en mí. Sigo sin saber exactamente por qué,
ya que yo no había hecho absolutamente nada malo, me había limitado a hablar
con una compañera de clase. ¿Qué hay de malo en ello? Vale, admito que me contó
cosas de Aly que quizás ella no quisiera que supiera, pero tampoco yo la voy a
juzgar sólo por lo que diga Marie. Eso sí, y supongo que alguno lo habréis
pensado, no entiendo cómo puede seguir Marco tan engañado, ¿quizá piense que es
bisexual? No sé, esto se está poniendo muy raro…
Siguiendo con el
ensayo, estuvimos ensayando la coreografía, pero no fue como siempre,
claramente algo pasaba y yo no sabía el qué. De normal, en los ensayos
añadíamos algún movimiento improvisado que daba mucha vida al baile y quedaba
de lo más natural, además hacía que ninguna representación fuese igual y que
muchas de las “bobadas” que hacíamos se incorporara a la coreografía en futuras
interpretaciones. Esta vez, por el contrario, se hicieron movimientos
mecánicos, sin apenas sentimiento, sin espontaneidad, todo muy soso para lo que
acostumbrábamos…
Esto me dio que pensar,
pero no quise decir nada, el aire estaba demasiado tenso, me dio hasta miedo.
Cuando habíamos bailado
la canción tres veces seguidas y estábamos todos agotados, en vez de ir un rato
a la cafetería a tomar algo todos juntos, cada uno se fue por su lado sin
hablar y se tomó su tentempié a solas. Yo no había llevado nada, así que me
quedé allí mirándoles sin decir nada, sin entender nada…
Aly entró al baño y
decidí que tenía que hablar con ella, así que la seguí hasta la puerta y allí
me quedé esperando.
-
Aly, espera, creo que deberíamos hablar,
¿qué pasa? ¿por qué la gente no se habla? ¿Por qué este cambio? Sólo he hablado
con ella, es una versión, nunca he oído la tuya, así que no puedo creerla.
Aly
no contestó al instante, sino que se quedó mirando fijamente a Sofía durante
unos segundos antes de apartar la mirada algo avergonzada y susurrar una frase
inaudible.
-
Perdona, no te he oído ¿qué has dicho? –
trató de sonar lo más amigable posible Sofía
-
He dicho que este no es un lugar para
hablar esas cosas, que no me sigas al baño.
-
Va…vale… lo siento, pensé que
preferirías hablar en privado que delante de todo el grupo.
-
Ese es el problema, tú nos ves como un
grupo, para mí son mi familia.
-
¿Cuál es la diferencia?
-
Que no oculto nada a mi familia. –
cambió la expresión seria y cansada que había mantenido por una sonrisa tímida –
ven.
Dicho y hecho, Aly
empujó mi silla hasta el centro de la pista, donde solíamos reunirnos en corro
a hablar.
-
Reunión familiar, chicos.
Todos se congregaron alrededor
de nosotras bastante más animados que antes, ya que suponían (al igual que yo)
que eso significaba el final de la discusión, vamos, que se arreglaban las
cosas y volvían a ser como antes.
Pero, como he dicho
antes, ojalá no hubiera ido al ensayo. Aly se puso en pie en el centro de aquel
círculo de personas, pronunciando en voz seria y grave un discurso digno de una
líder:
-
Familia, nos hemos criado juntos,
sabemos cada secreto, cada caída y cada tropiezo de nuestros compañeros. –
todos asintieron – Hace tres años decidimos llamar a esta familia “Rollernoters”
y desde entonces hemos vivido cosas grandiosas. – Fue girando para mirar a la
cara a cada uno de los presentes uno por uno – En las caídas, nos hemos
apoyado; en los fallos, nos hemos ayudado; en las malas decisiones, hemos
estado ahí; en los malos momentos, en los momentos de bajón, en los suspensos,
en las broncas, en las enfermedades… - llegó a mi cara – Pero no todos hemos
estado ahí, no todos sabemos nuestro pasado, no todos valoramos esta familia
más que nada, no todos…
-
Aly, te estás pasando – Salió Willow en
mi ayuda.
-
No, no me estoy pasando, estoy diciendo
la verdad. Ella no ha estado, no sabe lo que pasó, no sabe lo que sentimos, lo
que sufrimos, los problemas que tuvimos y los esfuerzos que tuvimos que hacer.
-
No es justo, no estuvo, vale ¿y qué? ¿No
nos ha ayudado todo este tiempo?
-
No, Will, agradezco que lo intentes,
pero Aly tiene razón, debería irme. Lo pillo – le hablé esta vez a Aly –
quieres que me vaya, podías habérmelo dicho antes, pero no, tú prefieres
hacerlo en público, para que tu familia te apoye a ti. Lo entiendo. Adiós,
chicos, gracias por estos días, han sido geniales. Suerte en la representación.
Salí
de allí sin mirar atrás, no sé qué pasó después allí, ni quiero saberlo. Se ha
acabado.
-
¿Sofía, estás ahí? Siento entrar así, me
ha abierto el botones.
-
¿Marie? ¿Qué haces tú aquí?
-
Bueno yo…
-
La he llamado yo – apareció Buffy (la
hermana de Willow) a su espalda
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Ahora me toca leerte a mí, soy todo... ojos, supongo: