Porque he decidido
que esta noche
sueño contigo,
y no voy a parar hasta conseguirlo.
Ya me habéis oído;
se acabaron las pesadillas,
los insomnios
y los duermevelas.
Hoy sonreiré
antes de irme a la cama,
porque en sueños
tengo una reunión contigo.
Que hagan el ruido que quieran los obreros,
que canten gallos y lechuzas,
que tiren los juguetes al suelo
todos los niños del mundo
al mismo tiempo…
Que destrocen la puerta a puñetazos
o que se caiga la casa abajo.
Que despierte el día
un poco antes de la cuenta…
Que haga
el mundo
lo que quiera.
Pero mis 8 horas contigo
no me las quita
ningún zumbido de mosquito
– disfrazado de quehaceres –
detrás de una oreja
que sólo muere
por estar
entre tus dientes.
Por las historias que rondan tu mente. Por las ganas de cambiar el mundo. Por las rimas. Por la música. Por el arte... El primer puercoespín enamorado de las letras comparte sus cuadernos de poesía. Cuidado, puede ser muy dulce o utilizar sus púas.
lunes, 19 de septiembre de 2016
Sin editar - pensando en ella
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Ahora me toca leerte a mí, soy todo... ojos, supongo: