Contigo aprendí

Yo contigo aprendí
a reír sin excusas,
a querer con motivos de sobra,
a saborear cada pequeña victoria
y buscarte con cada sentido.

Dejando el alma rota en el olvido,
cosiendo los restos de otro ataque fallido
hasta dar con mi viaje
imperfecto y sin destino.

Hablar con los ojos
sentir con las tripas
soñar a deshora
y deshacerme en mis caricias...

Aprendí a quererme y darme fuerzas.

Contigo,
aprendí a ser mi mejor guerrera y compañera.

Solo entonces,
carente de ausencias,
entera y con remiendos,
me di a ti sincera, 

buscando compartir el sol
que aprendí a criar en mi tejado.