Enséñame a soñar despierta
para no volver a dormir
y poder dedicarte mis noches
sólo a ti.
No prometo ser buena alumna,
fue la luna quien me enseñó a vivir
perdiéndome entre los bosques
en vez de huir.
Enséñame a reencontrarte,
aun sabiendo que no me perdí,
para disfrutar de esos besos
con esencia de jazmín.
Prometo fallar muchas veces
para poder repetir
y que puedas castigarme
a no moverme de aquí.
El amor, sin complicidad, no sabe igual. |
Por supuesto que para "ligar" hay que enseñar, pero no necesariamente carne, ¿no creéis? ;)
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Ahora me toca leerte a mí, soy todo... ojos, supongo: